Friederike Range (neurobióloga y etóloga): las emociones complejas en los perros


El lado oscuro de la devoción: Su perro puede estar celoso
marzo 19, 2009
por Shannon Firth


"Previamente, los científicos pensaban que los perros solamente eran capaces de experimentar sentimientos básicos, pero descubrimientos recientes han demostrado que son capaces de sentir emociones secundarias tales como los celos."

El mejor amigo del hombre puede también sentir celos


Anteriormente, los científicos tenían la impresión de que aun cuando los perros eran capaces de sentir rabia, lujuria y alegría, no podían experimentar emociones más complejas tales como los celos. Pero recientemente, The Daily Tepegraph informó que hay evidencia de que los perros sí se vuelven celosos, y pueden sentir otras emociones consideradas secundarias, incluyendo vergüenza, empatía y culpa.


En un estudio conducido en la Universidad de Viena, la Doctora Friederike Range descubrió que los perros respondían positivamente a todas las situaciones, independiente de recompensas, excepto en situaciones en las que veían a otro perro siendo recompensado por una prueba por la que ellos mismos no recibieron nada. En el experimento, Range hizo que 43 perros entrenados ofrecieran sus patas a investigadores humanos. Cuando a un perro se le negaba una recompensa que otro perro había recibido, él o ella ofrecía su pata menos de la mitad de las veces. Estos perros también se rascaban y lamían, exhibiendo signos de estrés. El experimento sugiere también otros escenarios en los que se otorga atención aparentemente injusta a otra mascota o persona.


Range dijo a New Scientist que “ahora estamos investigando la envidia en lobos, y me sorprendería que no la encontráramos.” The Daily Telegraph citó también al Dr. Paul Morris, un psicólogo de la Universidad de Portsmouth que dijo al Sunday Times que “estamos aprendiendo que los perros, caballos y tal vez muchas otras especies son mucho además emocionalmente complejas que lo que nos hemos percatado.”


Morris también declaró al Times que en sus estudios con dueños de perros descubrió que casi todos los perros se comportaban en forma celosa al principio de una nueva relación: en muchos casos, los perros intentaban alejar a su dueño de una nueva pareja romántica.



Un estudio reciente de la Universidad de Lincoln en Inglaterra informó que ciertos comportamientos caninos, adaptados a través de siglos viviendo con humanos, sugieren que los perros pueden ser capaces de leer las expresiones faciales humanas.



Friederike Range




1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Alucinante! y gracias por su buen hacer con nosotros.

Carmen